RN 14.05.2025. Con un acto académico, la Universidad Católica Boliviana “San Pablo” (U.C.B.) conmemoró sus 59 años de vida institucional. Uno de los momentos más significativos de la jornada fue la intervención de Mons. Ricardo Centellas, Gran Canciller de la Universidad, quien participó por primera vez en este acto en su nuevo cargo.
En su mensaje, Mons. Centellas felicitó a la comunidad universitaria por el aniversario, destacando que estos 59 años representan un trabajo constante en favor de la educación de calidad en Bolivia. “Muchísimas gracias a todos los que hacen parte de la universidad, a los estudiantes, a los catedráticos, a las autoridades en dirección. Gracias por su cariño, por su esfuerzo, por su sacrificio”, expresó.
Con un estilo cercano, el Gran Canciller compartió una anécdota vivida en el norte de Potosí, utilizando el relato para conectar con el sentido profundo de la celebración y hacer un llamado a no perder el rumbo como institución educativa. “Les invito a que recuerden que tienen dos ojos, pero también dos pies. Estamos llamados a caminar, no a patinar”, dijo en tono reflexivo.
Inspirado en la enseñanza del Papa León y en el contexto de los desafíos tecnológicos y sociales actuales, Mons. Centellas subrayó que toda universidad —y en especial una obra de la Iglesia— debe tener como pilares la dignidad humana y el bien común. “¿De qué sirve que exista una institución educativa si no trabaja por la dignidad humana? ¿Cómo se puede entender que un profesional altamente competitivo no trabaje para fortalecer el bien común?”, cuestionó.
El prelado lamentó la situación de división que atraviesa Bolivia, y llamó a superar las diferencias para construir juntos el país que todos merecen. “Es paradójico: no trabajamos para que Bolivia vaya adelante, sino para destruirla. Una universidad que no esté al servicio del país no tiene sentido”, afirmó.
Finalmente, invitó a toda la comunidad universitaria a renovar su compromiso como parte de una institución que es obra educativa de la Iglesia Católica, al servicio de la transformación social. “Estudiar tiene sentido si es para que ningún boliviano viva sin dignidad”, concluyó.
Con estas palabras, el acto académico no solo celebró un nuevo aniversario, sino también reavivó la misión esencial de la U.C.B.: formar personas comprometidas con el país, con fe, sabiduría y responsabilidad social.